LX

El gobernar un país
Es como cocinar un pescado:
Con mucho atizar se echa a perder.

Centra tu país en el Tao
y el mal no tendrá poder.
No porque no se encuentre presente
mas porque podrás quitarte de su camino.

No le des nada a que oponerse
y el mal desaparecerá por sí sólo.