XXVIII

Conoce lo masculino,
Pero aférrate a lo femenino:
recibe el mundo en tus brazos.
Si recibes el mundo en tus brazos,
el Tao nunca te dejará
y serás como un niño pequeño.

Conoce lo blanco,
pero aférrate a lo negro:
sé muestra para el mundo.
Si eres muestra para el mundo,
el Tao será fuerte en ti
y no habrá nada que no puedas hacer.

Conoce lo personal,
Pero aférrate a lo impersonal:
acepta el mundo tal como es.
Si aceptas el mundo,
el Tao será luminoso dentro de ti
y volverás a tu ser primario.

El mundo es formado del vacío,
como los utensilios se forman de un bloque de madera.
La Maestra concoce los utensilios,
pero se aferra al bloque:
por tanto, puede utilizar todas las cosas.