Cuando un hombre superior oye del Tao,
de inmediato empieza a incorporarlo.
Cuando un hombre común y corriente oye del Tao,
lo medio cree y lo medio duda.
Cuando un hombre necio oye del Tao,
se ríe abiertamente.
Si no se riera,
No sería el Tao.

Por tanto se dice:
La senda hacia la luz parece ser oscura,
la senda hacia adelante parece ir hacia atrás,
la senda directa parece ser larga,
verdadero poder parece ser débil,
verdadera pureza parece ser manchada,
verdadera constancia parece ser cambiable,
verdadera claridad parece ser oscura,
gran arte parece ser no sofisticado,
gran amor parece ser indiferente,
gran sabiduría parece ser infantil.

No hay dónde hallar el Tao.
Mas nutre y completa todas las cosas.