XLV

Verdadera perfección parece imperfecta,
sin embargo, es perfectamente sí misma.
Verdadera plenitud parece vacía,
sin embargo, está plenamente presente.

Verdadera rectitud parece torcida.
Verdadera sabiduría parece tonta.
Verdadero arte parece ser sin arte.

La Maestra permite que las cosas sucedan.
Ella forma los eventos conforme aparecen.
Se hace a un lado y
permite que el Tao hable por sí mismo.